Dejando de lado un poco el tema
del estudio de la fauna laboral y las asombrosas costumbres de quienes habitan
este lugar que es como una especie de distorsión en el espacio-tiempo, quiero
dedicar unos minutos a hacer algo que bien podría considerarse un poco de crítica
social, esto al ver los destinos que persiguen los jóvenes graduandos de esta generación,
y es que ciertamente es lamentable el ver como estos pequeños prospectos de
adultos responsables han aprendido de todo durante su vida estudiantil, excepto
a vivir y a ser responsables o mínimamente capaces de subsistir.
Tomo por ejemplo lo que viví en
uno de los famosos cibercafés que ahora son casi una raza extinta pero que aún
subsisten algunos en nuestra ciudad, estaba yo allí de casualidad buscando
sacar unas fotocopias, cuando de pronto vi una pacotilla de estudiantes de
cierto colegio privado de la ciudad de Puerto Cortes, parecían aturdidos y
espantados por algo, como de costumbre, decidí ignorarlos y seguir en mis
ocupaciones, más al escuchar lo que los tenía asustados no pude más que
asombrarme y sentir pena, pero al mismo tiempo pensar: “a qué carajo van al
colegio”, resulta que durante el tiempo que yo estuve allí, ellos estuvieron
subiendo fotos a las redes sociales, chateando y buscando pareja con personas
desconocidas en internet cuando supuestamente andaban haciendo un trabajo de investigación,
pude descubrir que las viejas costumbres no se pierden y se transmiten por
generaciones, pues mientras todos perdían el tiempo en internet viendo lo que
fuera que se les ocurriera y que sirviera para el “deshidratamiento” cerebral, había
uno que había sido designado para buscar la tarea, algo así como el conductor
designado para los que salen a beber, pues cuando aquel eminente investigador
de temas por internet, encontró en la Wikipedia un texto que tenía el mismo título
que se les había dejado investigar, fue cuando todos entraron en tremendo
dilema y parecía que en todo el grupo no había quien supiera cual era el
siguiente paso a realizar, resulta que querían imprimir la información pero
ninguno de aquellos “casi-profesionales” sabia como copiar aquel texto, pegarlo
en un archivo de Word y luego imprimirlo.
Ciertamente aquello me resulto inverosímil,
que alguien no supiera copiar y pegar en la computadora, pero no fue tan
impresionante como lo que ocurrió luego, resulta que con tanto barullo, un
señor que estaba cerca, decidió hacer su buena acción del día, y acercándose a
la jovencita designada para la investigación le dijo: “Solo dele seleccionar
todo, luego le da ctrl+c y abre Word, luego le da ctrl+v y ya va a tener el
archivo listo para imprimir, solo le corrige la letra y los márgenes a su gusto”.
Asombrosamente, aquella chica lo
quedo viendo como quien se encuentra con un chino recién asaltado por la calle
y lo escucha tratando de explicar lo ocurrido en su lengua, no había entendido
ni una sola palabra, por unos segundos se quedaron viendo entre sí con otra
compañera como esperando que entre ambas pudieran traducir algo de lo que habían
escuchado, el señor al ver aquel derroche de ignorancia, y haciendo un gesto de
desaprobación le dijo: “permítame ayudarle, mire”, y haciendo lo que para
aquellas jóvenes eran extrañas combinaciones de teclas abrió un extraño
programa con un signo de W azul, luego toco otros botones de forma extraña y
todo lo que estaba en Wikipedia apareció como por arte de magia en este nuevo
programa, una vez haciendo esto le dijo: “Listo, ahora solo lo imprime y ya”.
La joven nuevamente empezó a
verse con su amiga y trataban de saber a qué se refería el hombre, pero no entendían,
entonces una de ellas, con un tono coqueto se dirigió nuevamente al señor y le
dijo: “hey usté, ayúdenos a imprimir eso vaya, que nosotras no podemos”, el
hombre, haciendo un gesto de desaprobación le dijo: “Bueno pero fíjese bien
para que aprenda”, y toco nuevamente el teclado mientras las chicas estaban
ensimismadas en sus teléfonos móviles, y la impresora del establecimiento empezó
a lanzar como por obra de la brujería, las páginas con la tarea requerida.
Cada vez que recuerdo aquella
escena, me siento motivado a procurar el conocer métodos de curandería, y otros
medios de medicina alternativa, pues realmente no deseo encontrarme en el
futuro, con la necesidad de visitar al médico y que este en lugar de tratar mi
enfermedad, acabe tomándose fotos comprometedoras con mi cuerpo inerte para
subirlas al Facebook, y es que sin duda alguna a esto nos estamos encaminando, aún
recuerdo cuando estaba en la escuela y en quinto grado el profesor empezó a
enseñarnos sobre la raíz cuadrada, y una ligera orientación sobre álgebra,
ahora resulta que muchos estudiantes de secundaria no tienen idea de esto,
sustituyen la z por xx, y no es raro verlos escribir mensajes como “thu ereezz
mi amiaa dl alma”, a veces me pregunto si acaso esto será el nacimiento de un
nuevo idioma como cuando el latín murió para dar origen a todos los idiomas que
se habla en Europa occidental y América, o si simplemente será el reflejo de
una educación decadente en la que los profesores solamente se presentan al aula
de clases a cumplir con sus horas reglamentarias y encargarse de que la
curiosidad innata que tiene el ser humano por aprender se vuelva tediosa para
los niños, y que al llegar a la adolescencia y primeros años de adultez sigan
reflejando la ignorancia que desde pequeños les fue inculcada.
Adorable y desdichada ignorancia, y es peor aún ignorancia-falta de interés-e inanición. Interesante crítica mi joven amigo escritor. Es muy lamentable saber, que en mi querido y viejo lugar de procedencia, quienes tienen que aprovechar su juventud y extraer lo máximo de su mejor época de oportunidades en su vida, la pierde como si el tiempo y la vida social le proporcionará iguales o mejores oportunidades y éxitos.
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